A falta de concretar los últimos detalles y rubricar el contrato para que Microsoft absorba oficialmente Nokia como fabricante de smartphones, existen datos que indicarían que el gigante del software seguirá usando el “apellido” Lumia en sus próximos modelos. Al menos así reza la información difundida por la Red basada en algunas capturas filtradas por una persona familiarizada con la próxima actualización del sistema, Windows Phone 8.1.
La operación de Microsoft para hacerse con el poder de Nokia derivará en grandes consecuencias en el mercado de smartphones con Windows Phone. En esta ocasión la compra no valora mantener la marca del fabricante como así sucedió en adquisiciones similares (Google y Motorola). Sin embargo, los norteamericanos no invertirán más de 5.000 millones de euros para desechar un proyecto que ha costado mucho esfuerzo, tiempo e igualmente dinero, especialmente el destinado a promocionar los Nokia Lumia.Interfaz de Windows Phone 8.1 en un terminal Lumia
Esta misma hipótesis la constatarían unas capturas que han aparecido en la cuenta de Twitter del usuario Xeŕo. Al parecer, esta persona tendría acceso a la última actualización de Windows Phone, concretamente a Windows Phone 8.1 Blue. Y es que las últimas publicaciones incluyen imágenes en las que aparecen las supuestas capturas del sistema operativo. Además del interés que puedan suscitar detalles como las notificaciones y otras novedades funcionales, tal vez la parte más interesante llegue de los datos implícitos de algunas de estas. Y es que en varias podemos ver la carcasa de los supuestos modelos que ejecutarán de forma nativa esta versión de Windows Phone.
Gama Lumia, demasiado importante para la expansión de Windows Phone
La parte frontal denotaría que los próximos terminales lanzados por Microsoft, supuestamente a partir de 2014, suprimirían cualquier referencia al fabricante finlandés. En su lugar, los estadounidenses sí optarían por incluir la distinción Lumia en los equipos, tal y como se aprecia en la parte superior derecha. De hecho, esta estrategia sería similar a la utilizada en las últimas tabletas presentadas, las Microsoft Surface de segunda generación. En esta ocasión las Surface 2 y Surface Pro 2 prescindirán del logo de Windows en la parte trasera, habitual en las primeras versiones, para dar valor a la línea “Surface”. En el caso de los smartphones el razonamiento sería mantener el valor creado por Nokia a la gama de terminales Nokia Lumia, aunque prescindiendo del fabricante para iniciar el proceso de transición sin que por ello se pierda la referencia Lumia que los usuarios ya asocian indirectamente a los terminales de la finlandesa.